¿Sabías que uno de los principales motivos por los que la ropa se desgasta más rápido es la por humedad? Y más todavía si los textiles están expuestos a ambientes húmedos como puede suceder en barcos y entornos donde la lluvia es muy abundante como Galicia. Por todo ello, te vamos a contar cómo evitar la humedad en textiles con una serie de trucos y claves que te contamos en este post.
Además de explorar cuáles son las causas por las que aparece la humedad en la ropa también detallaremos las mejores soluciones y consejos para mantener la ropa seca en cualquier ambiente y en óptimas condiciones para que no se deteriore tan rápido.
Los problemas que genera la humedad en la ropa y textiles
Antes de entrar en detalle con los consejos para impedir la humedad necesitáis saber por qué debéis evitar la humedad a toda costa. Y es que un textil esté impregnado de líquido todo el tiempo no solo afecta a su durabilidad, también provoca otros problemas.
Entre ellos están los siguientes:
- Manchas de moho, hongos y bacterias. El moho es un hongo que crece en lugares húmedos y puede causar manchas oscuras en la ropa y textiles. Lo mismo sucede con los hongos y bacterias. Estos microorganismos encuentran un ambiente propicio para crecer y reproducirse en condiciones húmedas, lo que puede generar problemas de salud, como alergias, irritaciones en la piel e infecciones respiratorias. Esto es especialmente grave para las personas que tienen problemas de asma y alergias.
- Malos olores y daños en las fibras de la tela. Uno de los principales inconvenientes es el mal olor que se desprende de las prendas húmedas. Esto puede ser particularmente desagradable cuando la humedad proviene del sudor, ya que las bacterias presentes en la piel descomponen los residuos de sudor y producen un olor desagradable que hay que evitar a toda costa.
- Puede debilitar las fibras de los tejidos: la humedad constante puede dañar el interior de los tejidos al llegar a las fibras. Si esto sucede puede llevar a la aparición de manchas, decoloración y, en casos extremos, al deterioro irreparable de las prendas.
Desde la ropa de cama hasta las cortinas y la ropa de vestir pueden absorber fácilmente la humedad y, si no se cuidan adecuadamente, pueden albergar moho y malos olores.
Por suerte, hay varias técnicas y métodos que puedes utilizar para evitar la acumulación de humedad en tus textiles. Así, tanto los tengas en tu barco como en casa evitarás que se estropeen y que te duren más tiempo.
¿Cómo evitar la humedad en textiles?
Es fundamental abordar y prevenir la humedad en la ropa para evitar los inconvenientes que os detallamos antes, en especial, aquellos problema que pueden acabar dañando la salud al afectar a los pulmones y capacidad de respiración.
Para ello, sigue estos consejos:
Airear y lavar frecuentemente la ropa
Una de las formas más naturales de evitar la acumulación de humedad es airear los textiles. Cuando cuelgas los textiles en un lugar bien ventilado, permites que el tejido respire, evitando así la humedad que pueda quedar atrapada en su interior.
También puedes utilizar ventiladores o ventanas abiertas para favorecer la circulación del aire por la habitación. Cuando laves tus tejidos, es esencial que utilices la configuración adecuada para asegurarte de que permanecen sin humedad.
Si es posible, seca siempre tus tejidos al aire libre, bajo la luz directa del sol, y evita utilizar una secadora a menos que sea necesario. Cuando laves la ropa, las toallas o la ropa de cama, asegúrate de sacarlas de la lavadora rápidamente para evitar que se humedezcan.
En el caso de los barcos intenta aprovechar los días de sol para tender la ropa fuera y airear el interior.
Aprovecha la tecnología y usa absorbentes
La tecnología es uno de los mejores aliados a la hora de impedir que la humedad estropee nuestra ropa. Para ello, nos podemos apoyar en aparatos como los deshumidificadores, ventiladores y similares.
Estos dispositivos son perfectos para usar en casa ya que eliminan eficazmente la humedad del aire, lo que ayuda a prevenir la aparición de moho en tus tejidos. Para aprovechar mejor el potencial de estos aparatos sigue estos consejos:
- Asegúrate de que estén en buenas condiciones de funcionamiento y sin fugas.
- Colócalos en las zonas con mayor acumulación de humedad, como el cuarto de baño, y asegúrate de que se vacían con regularidad.
- Consulta la capacidad de carga y calcula cuánta humedad son capaces de quitar. Esto viene determinado por su volumen que determina su capacidad en metros cuadrados. Una vez sepas este dato sabrás dónde funcionan mejor. Así, podrás colocarlos en zonas de tránsito como el pasillo ya que igual son capaces de cubrir más metros.
Otra forma de conseguir evitar la humedad en tus textiles es usar absorbentes. Estos productos ayudan a eliminar cualquier exceso de humedad en el aire, lo que minimiza la posibilidad de que aparezcan moho y hongos.
Algunos tipos comunes de absorbentes de humedad son el gel de sílice, el carbón activado y los desecantes comerciales. Otros ejemplos de productos desecantes son las bolsas antihumedad que se colocan en las esquinas de los armarios.
Coloca estos productos cerca de tus textiles para garantizar la máxima eficacia y ten en cuenta los siguientes aspectos:
- Revisa y lee las instrucciones. Algunas bolsas no deben tocar la ropa, por lo que es aconsejable alejarla de la misma, por ejemplo, colocarla en una esquina.
- Cambia los absorbentes cada cierto tiempo. Los desecantes una vez cumplen su función deben ser retirados y cambiados por unos nuevos.
Con el uso de estas bolsitas puedes evitar el polvo, la humedad y la corrosión de la ropa. Eso sí, ten en cuenta que no es un sistema eficaz al 100% por lo que debes combinarlos con otros sistemas como la ventilación y la limpieza. Otro truco clásico que también puedes probar es el uso de arroz seco en calcetines y saquitos.
Almacena y guarda la ropa correctamente
¿Sabías que si eres desordenado tu ropa puede coger más humedad? Aunque no te lo creas si ordenas y guardas bien la ropa puedes reducir la cantidad de humedad que se acumula en ella.
¿Cómo? Fácil, por ejemplo, si guardas todas las mantas en un solo lugar y apretadas entre sí es probable que cojan más humedad. Para evitar esto, intenta no apretar tanto la ropa e intenta guardar y separar la ropa de verano y de invierno.
También puedes usar separadores para la ropa como cartón.
Otro truco es usar bolsas anti-humedad o de vacío y guardar la ropa dentro. Eso sí, revisa que esté seca antes de guardarla no vaya a ser que cuando la quites esté estropeada.
Invierte en ropa de cama y toallas desechables
La ropa de cama y las toallas desechables están diseñadas para ser absorbentes y transpirables. Esto significa que pueden absorber la humedad y permitir que el aire circule, lo que ayuda a mantener el ambiente seco y cómodo.
Otra ventaja es que son higiénicas y fáciles de limpiar. En un ambiente húmedo, es importante mantener la ropa de cama y las toallas limpias y secas para evitar la acumulación de bacterias y hongos.
Además, la ropa de cama y las toallas desechables son fáciles de reemplazar y desechar, lo que las hace ideales para su uso en barcos o en lugares donde hay mucha humedad. Incluso en entornos muy fríos como la Antártida donde nuestros amigos de Alegría Marineros la han usado.
Impide la humedad de los textiles en barcos
La humedad en los barcos es un problema persistente y desafiante como todo buen marino sabe. Las condiciones marítimas y la exposición al agua pueden generar un ambiente propicio para la humedad, lo que a su vez puede dar lugar a problemas como moho, malos olores y daños en la infraestructura del barco.
Por este motivo, la elección de la ropa de cama adecuada es crucial. Optar por sábanas, fundas de almohada y protectores de colchón desechables puede marcar la diferencia de tener menos humedad en un sitio tan reducido como es el camarote de un buque.
Nuestros productos de navegación sostenible están diseñados específicamente para ser absorbentes y resistentes a la humedad. Al ser desechables, se pueden reemplazar fácilmente y mantener un ambiente fresco y seco en todo momento.
Además, su uso evita la acumulación de humedad en las camas, lo que ayuda a prevenir la formación de hongos y malos olores y con ello la mayoría de los problemas derivados del exceso de líquido.
Como podéis comprobar la humedad es un verdadero dolor de cabeza, pero existen métodos muy efectivos para impedir que dañe nuestra ropa y textiles. Esperamos que estos consejos os hayan gustado y os sean útiles la próxima vez que vayáis de viaje o a navegar. ¡Que tengáis buena travesía mariner@s!